jueves, 2 de junio de 2016

Visita al Museo del Prado

Visitar el Museo Nacional del Prado siempre es una delicia.

Es tanta la belleza que te rodea cuando paseas por sus pasillos, que el corazón se llena de alegría.

Da igual que no seamos expertos en arte, eso es lo maravilloso, que todos somos capaces de apreciar la grandeza de estas obras.

¡Y allí fuimos los niños de 1ºA y 1º B!

"Seño, ¿podemos llevar a Solete?"

Y por supuesto, nos acompañó.



Cuando entramos en el museo, Alex nos estaba esperando, con la sonrisa más encantadora del mundo. Eso sí que es saber acoger.

Alex nos explicó en qué consistiría la visita, qué es una colección...y contestó a todas nuestras preguntas.






Ethan preguntó por qué el museo se llama "del Prado" si no tiene flores.
Alex nos contó que el museo ocupa un espacio que pertenecía a la iglesia cercana de los Jerónimos. Este espacio, efectivamente, era un prado.

Este es un pequeño plano del centro de Madrid, donde vemos ubicado el museo.



Dentro del museo no se pueden hacer fotos, pero sí en los pasillos. Bonitos, ¿verdad?

Cuando finalizamos la visita, Alex nos entregó unas pegatinas, con la representación de algunos de los cuadros que habíamos visto.



 Y con nuestros "cuadros" organizamos como quisimos, nuestra propia exposición.





 Antes de regresar a casa, nos tomamos el bocadillo y unos pajaritos vinieron a hacernos compañía.
¡No se asustaban de nosotros!



 Después de una mañana estupenda...
Volvemos a casa.










Gracias por acompañarnos Tamara

Las profesoras también disfrutamos mucho.
¡Un beso, Soletes!